Un bug de WhatsApp atenta contra la seguridad
La aplicación de mensajería instantánea más importante del mundo vuelve a estar en el centro de las noticias por cuestiones de seguridad. Ahmed Lekssays, un investigador de seguridad en apps y sistemas operativos móviles, detectó un fallo en WhatsApp para iOS que permite a un usuario extraer toda la información de contactos y el contenido de las conversaciones de un dispositivo ajeno.
Lekssays, estudiante de ingeniería informática en la Universidad de Al Akhawayn, ya había descubierto en otras ocasiones vulnerabilidades en la aplicación Twitter para iOS, permitiendo el acceso a terceros a cuenta de la misma aplicación. En el caso de la red de microblogging, corrigieron el problema rápidamente, pero con la tasa de actualizaciones que tiene WhatsApp puede que pasen unos meses hasta que el problema actual sea corregido.
¿Qué se necesita para violar la seguridad de WhatsApp en iOS?
Ahmed Lekssays nos demuestra que lo único que se necesita para violar la seguridad de WhatsApp es un iPhone y un ordenador funcionando con el sistema operativo Linux. Con esto fue capaz de acceder a las cuentas de WhatsApp y extraer el contenido de las conversaciones, desde textos hasta archivos transferidos de audio, video e imagen.
El método de Lekssays además no diferenció entre dispositivos iOS con métodos de bloqueo o dispositivos sin medidas de seguridad. El fallo de seguridad de WhatsApp es tan específico que aún los teléfonos bloqueados con claves de seguridad o Touch ID también son vulnerables.
La revelación fue presentada en la revista marroquí TelQuel, donde Lekssays explicó que cualquier usuario con malas intenciones y un poco de conocimiento informático puede aprovechar esta vulnerabilidad para violar la privacidad de otros usuarios en WhatsApp.
WhatsApp es la app de mensajería más popular y menos segura de todo el mundo
La aplicación WhatsApp, hoy propiedad de Facebook, tiene más de 800 millones de usuarios activos en todo el mundo. Es por lejos la aplicación más usada en su estilo, por eso no se pueden permitir fallos de este tipo. Lo bueno es que sean detectados antes por investigadores de seguridad que por delincuentes informáticos. Ahora está en manos de WhatsApp diseñar el parche y solucionar la vulnerabilidad en el menor tiempo posible.
Lo que sí, teniendo en cuenta el historial de actualizaciones de WhatsApp, puede que tarden un tiempo. Si tenemos en cuenta que las notificaciones interactivas están disponibles desde septiembre del año pasado pero todavía no se han habilitado, puede que pasen algunos meses antes de que aparezca la actualización para cubrir esta nueva vulnerabilidad.
