Os traigo una de tantas curiosas noticias relacionadas con el iPhone. Esta vez es la NASA la protagonista, ya que ha creado un sensor químico para nuestro terminal. Jing Li, respetado científico, ha liderado el proyecto hasta su culminación.
Este sensor sería capaz de detectar e identificar concentraciones bajas de amoniaco en al aire, el gas de cloro y metano. La utilidad real de esto es un poco ciencia ficción o, quizás no. Si lo tuviésemos en nuestro iPhone podríamos detectar un ataque químico terrorista, por ejemplo.
Este curioso aparato detectaría los diferentes productos químicos en el aire a través de un “chip de muestra” y un canal múltiple de silicio que consiste en 16 nano sensores y enviarían la información recogida a otro teléfono o computador a través de una conexión inalámbrica. Esta es la idea, ya que aún, no han conseguido que funcione esta complema comunicación.