A plena luz del día robaron varios iPhones de la Apple Store de Lancaster, por valor de unos 10.000€, es el segundo robo de este tipo que sufre Apple, el primero optaron por MacBooks.
Los ladrones no deben ser muy espabilados, ya que aparte de las cámaras de seguridad, estos iPhones ya están registrados para cuando se intenten activar, poderles pillar con ellos.