Según uno de los últimos cómics en The Joy of Tech, en ocasiones podemos llegar a ser insensiblemente indiferentes a nuestra pareja o acompañante en las reuniones, y aunque el cómic ilustra con humor uno de esos momentos, cada vez nos damos cuenta en nuestro entorno que una salida fácil a esos silencios incómodos en alguna cita es el uso del teléfono móvil.

Basta con cogerlo y desbloquearlo para parecer que estamos haciendo algo importante o simplemente parecer ocupados en algo para justificar esos momentos en que se terminan los temas de conversación sin parecer personas aburridas o sin charla.

Lo anterior viene a cuento porque recientemente hemos notado cada vez más gente en bares y restaurantes con el iPhone en la mesa, siempre listo para salvar esos momentos inesperados.  Y es que un viernes por la noche a la hora de la cena, una pareja que sale para pasar un buen rato no tendría porque estar pendiente del teléfono como para tenerlo cinco centímetros a mano del plato de la cena; si estamos hablando de un médico que puede recibir cualquier aviso de emergencia lo entendemos, pero, en momentos de ocio, se convierte en un buen aliado para «salvar» la falta de charla con nuestra cita.

Claro que en estricto sentido podríamos estar haciendo el check-in en Foursquare o actualizando nuestro perfil en Facebook diciendo lo que vamos a cenar pero es que no guardamos el iPhone para cenar, sino que lo dejamos ahí fuera en caso de necesitar su ayuda.

Luego están los comensales o clientes de restaurantes o cafés que simplemente se reúnen para tomar algo y estar en el iPhone, sin charlar apenas lo necesario.

¿Y tú?, ¿Necesitas el iPhone como aliado para esos terribles momentos sin charla?